Tipos de amor: ¿Sabes cuál es el tuyo?

“All you need is love (nananananaaa), All you need is love… love… Love is all you need”.  Todo lo que necesitamos es amor, al menos eso es lo que nos repetían los Beatles y es que, esa construcción cultural, está presente allá a donde miremos. Tenemos amor y parejas por todas partes, es algo de nuestro día a día aunque estemos solteros, pero ¿sabías que existen diferentes tipos de amor?

Caemos en el error de que englobamos todos los tipos de amor como si fueran uno solo, cuando, según sus características, podemos hablar de diferentes cosas.

¿Qué es lo que hace que los diferenciemos? ¿Cuántos tipos de amor hay? ¿Cómo puedo saber cuál es el que tengo con mi pareja?

Vamos a hablar de los tipos de amor y sus características.

¿Qué es el amor?

Hablamos de amor a diario, en nuestras conversaciones, en los medios, en las canciones, en los libros,… Amor, amor, amor.

¿Nos referimos todos a lo mismo? ¿Qué es el amor?

El amor es una construcción cultural, es decir, según la cultura (o incluso época histórica) puede referirse a un concepto u otro.

Podemos entender al amor actual, en nuestros tiempos, como:

• Una actitud: atracción por una persona en la que pensamos, por la que sentimos y que nos predispone a comportarnos de cierta forma hacia ella.
• Una emoción: sentimiento y pasión acompañados de reacciones fisiológicas.
• Una conducta: cuidar al otro, compartir momentos, atender a sus necesidades, preocuparse por él/ella,…

Vale, tenemos el amor, pero ¿qué es lo que hace que lo sintamos por una persona y no por otra? ¿Por qué “decido” amar a esa persona en concreto?

En los artículos “Cómo elegimos pareja I y II” vimos qué factores nos influyen a la hora de escoger a esa persona, pero digamos que los más importantes son: el atractivo físico, la semejanza, la reciprocidad y la proximidad.

También existen una serie de mitos sobre el amor que pueden condicionarnos a la hora de escoger o amar al otro. Pero de esto ya hablamos en el artículo “¿Por qué falla mi relación de pareja?”, que te animo a leer también.

Tipos de amor.

Como hemos dicho, no solo existe un tipo de amor, sino que podemos diferenciarlos por sus características.

Los tipos de amor más comunes son los siguientes:

• Eros o amor pasional.

Como bien dice su nombre se caracteriza por una pasión irrefrenable, con sentimientos intensos, mucha intimidad, una fuerte atracción física y alta actividad sexual.

Es el más común entre los jóvenes o comienzo de relaciones de pareja.

Hablamos de eros cuando sentimos ese “flechazo”, la sensación de ser “el uno para el otro”, “de química” o “pareja ideal”.

• Ludus o amor lúdico.

Este tipo de amor conlleva encuentros sexuales esporádicos, con pocos sentimientos, sin proyectos futuros y alta evitación del compromiso y de la intimidad.

Se trata de una relación sin compromisos, donde solamente mostramos al otro una parte de nuestra vida (no sentimos las ganas de compartir nuestro pasado, día a día o suelos futuros con el/ la otro/a) y es posible que existan más de una pareja sexual.

• Storge o amor comprometido/amistad.

Lo que más caracteriza a este tipo de amor es el compromiso que se desarrolla de forma paulatina y con prudencia. Las personas que lo comparten, tienen actitudes y valores parecidos, tienen su base en la amistad  y el cariño y buscan que su vínculo sea más duradero (a largo plazo) que algo pasional que sea temporal.

Es difícil saber dónde empieza la amistad y empieza el amor en este tipo de parejas, pues comenzaron siendo amigos/as surgiendo el amor a medida que pasaba el tiempo.

• Pragma o amor práctico.

El amor pragmático es una mezcla de dos tipos de amor: Ludus y Storge.

Hablamos de pragma cuando nos referimos a la búsqueda de una pareja de forma racional, es decir, sopesar una serie de factores para comenzar una relación con esa persona.

Considerar ventajas e inconvenientes de salir con esa persona, planificar diferentes aspectos del futuro en pareja, conocer bien a la familia y entorno de la otra persona antes de comprometerse, evaluar si será buen padre/madre,…

Otros aspectos que se tendrán en cuenta a la hora de pensar en una relación con otra persona son: su estatus social, su empleo, sus bienes,…

• Manía o amor obsesivo o posesivo.

Es una composición de Eros y Ludus. Se trata de un amor intenso e íntimo, donde sobresalen los celos, la falta de comunicación y se da mucha importancia a las reacciones fisiológicas que se sienten.

Dentro de los tipos de amor, este es el más tóxico porque, si una de las personas siente que su pareja no le presta atención, buscará los medios para llamarla, aunque sean cosas estúpidas.

Las emociones que se sientes son extremas, tanto si son buenas como malas, siendo muy placenteras unas (hasta el punto de no poder concentrarse en nada más) y extremadamente dolorosas otras.

También es peligroso porque, al producirse una ruptura, uno/a de los/las dos puede pensar en el suicidio.

Por favor, si te identificas en una relación así, ponte en contacto con un profesional de la psicología que te ayude a mejorar o salir de ella.

• Agape o amor altruista.

Mezcla de Eros y Storge.

En este amor, encontramos el dar todo lo que tenemos antes que esperar recibir y del autosacrificio para lograr el bienestar de la otra persona.

Las dos personas se apoyan pese a los defectos o fallos de la otra.

Se cree que no podrá ser feliz uno/a hasta que no lo sea el/la otro/a.

Además, se pondrá a disposición de la pareja todo lo que se posea.

Se trata de un amor incondicional absoluto y completo hacia el/la otro/a pase lo que pase.

Tipos de amor: Teoría Triangular de Sternberg.

Como suele ocurrir, existen diferentes teorías de un mismo concepto y Robert Sternberg desarrolló la suya para dar explicación a los diferentes tipos de amor.

Según esta Teoría Triangular del Amor de Sternberg, el amor tendría tres componentes principales: la pasión, la intimidad y el compromiso. En función de la presencia o ausencia de uno o varios componentes, se irían conformando los tipos de amor.

• Pasión: entendemos la pasión como el deseo intenso, excitación mental, fisiológica y emocional y/o atracción que se siente por la otra persona. Es un anhelo profundo y una gran necesidad física.
• Intimidad: es el vínculo, conexión, sentimiento de cercanía, unión y afecto hacia el/la otro/a. Es el deseo de dar, recibir y compartir y el interés por el bienestar de la pareja.
• Compromiso: la decisión de establecer y mantener ese amor y de crear un proyecto de futuro conjunto, haciendo frente a los obstáculos que se puedan presentar.

Vamos a ver las diferentes combinaciones entre ellos y los tipos de amor resultantes.

• Amor consumado (Pasión + Intimidad + Compromiso): tendríamos presentes los 3 componentes. Para Sternberg es el amor perfecto, el ideal y completo. Sería muy complicado llegar a mantenerlo, incluso más que crearlo, por lo que es posible que se desarrolle en otro tipo con el tiempo.
• Cariño (Intimidad): es lo que comentábamos antes en los componentes. Es un vínculo y cercanía con la otra persona, pero sin deseo sexual o intención de proyecto futuro. Se trata de la verdadera amistad.

Por ejemplo: relación de amistad con un/a amigo/a.

• Encaprichamiento (Pasión): es el flechazo, la atracción física pura, el deseo de tener contacto físico con la otra persona. Simple deseo, sin compromiso, sin compartir más que ese acto sexual.

Por ejemplo: un rollo o ligue de una noche.

• Amor vacío (Compromiso): solamente existe una unión por compromiso, no existen sentimientos ni pasión, pero sí un respeto por el otro. Puede ser el resultado de la pérdida de la pasión y la intimidad o el comienzo de una relación acordada.

Por ejemplo: un matrimonio concertado.

• Amor Sociable (Intimidad + Compromiso): este tipo de amor se da en los matrimonios donde la pasión se ha desvanecido, pero existe un gran cariño entre ambas personas. Ya no hay deseo sexual, pero se sigue deseando compartir la vida y proyecto vital. Podemos encontrarlo en familia o entre amigos íntimos, donde, a pesar de pasar mucho tiempo juntos, no existe deseo sexual.

Por ejemplo: amigos/as íntimos/as o matrimonio de muchos años.

• Amor romántico (Intimidad y Pasión): pese a que parece que este, de primeras, es muy parecido al amor consumado, a diferencia de este último, no existe un compromiso ni la intención de un proyecto futuro común.

Por ejemplo: un amor de verano.

• Amor fatuo o loco (Pasión y Compromiso): dentro de los tipos de amor, este carece de intimidad, solamente consistiría en pasión y un compromiso de continuarlo, es decir, la misma pasión es el pegamento de esta relación. Existe un acuerdo común en el que no se comparte nada más allá de sexo y no se realizan otras actividades conjuntamente que no impliquen la pasión.

Por ejemplo: una relación de amantes o “follamigos/as”.

Como has podido observar, no solo existe una forma de amar, sino que hay muchos tipos de amor, todos válidos y con sus características.

Después de haber leído el artículo, puedes pararte a pensar si ese tipo de amor que tienes con tu pareja es de tu agrado o te gustaría que fuera diferente. Esto puede ayudarte a tomar decisiones, en caso de que quieras tomarlas, para transformarla o hacerla evolucionar a algo que te apetezca más.

Si deseas trabajar la pareja, los psicólogos podemos ayudaros a conseguirlo y así tener ambos/as el amor que deseáis. A veces es muy sencillo mejorar las relaciones con pequeños cambios. Si os animáis, podéis contactarnos aquí.

De todos los tipos de amor que te he expuesto, ¿Cuál crees que se ajusta más a tu relación? ¿Cuál crees que es el que más se ve en tu entorno? Cuéntanoslo en comentarios.