Preparar a un niño para una operación es muy importante y puede resultar complicado para la familia. Para poder hacerlo adecuadamente resulta esencial que los padres dispongan de la máxima información posible sobre la intervención quirúrgica.
Saber qué ocurrirá antes, durante y después de la intervención, les permitirá disipar sus dudas al respecto para poder informar a su hijo de lo que le van a realizar, y disminuir la ansiedad que pueda sentir.
El Niño Antes de la Operación
En el caso de los niños pequeños, es importante adecuar esta información a su nivel de comprensión. Esto no significa que debamos mentirle, sino simplificar esta información de modo que pueda comprenderla.
Podemos explicarle el por qué es necesaria la operación, evitando palabras alarmantes o amenazantes, y poniendo énfasis en los beneficios que le puede reportar. Se trata de que entienda el motivo por el que deberá someterse a una situación desagradable como resulta una intervención quirúrgica, para evitar que pueda pensar que se debe a un castigo.
Es importante que los padres permanezcan con una actitud tranquila en el momento en que se dispongan a explicárselo. Si un niño ve que sus padres están nerviosos o temerosos, él también lo estará. A continuación, te doy algunas ideas a tener en cuenta a la hora de preparar a un niño para una operación.
[bctt tweet=»Es importante adecuar la información al nivel de comprensión del niño» username=»Serendipia_psic»]
El Niño Durante la Operación
La posibilidad de sentir dolor puede generar mucho temor en los niños. Debemos explicarle que durante la operación no sentirá dolor puesto que estará dormido por la anestesia, pero que después de la operación se despertará. Puede que después se sienta un poco extraño (estar adormilado, tener frío, tener náuseas…) pero es algo normal y debemos avisarle para que no se preocupe y se asuste.
Otro aspecto a la hora de preparar a un niño para la operación y que le puede inquietar, es el miedo a la separación de los padres. Puede resultar de ayuda explicarle que durante la operación los padres no pueden entrar, pero que estarán fuera esperándole y cuando se despierte podrán estar a su lado.
Después de la Operación
Puede ser beneficioso informarle sobre los aspectos negativos que conlleva la operación para evitar sorpresas desagradables. Es posible que tras una intervención quirúrgica necesite algún tipo de medicamento para calmar el dolor, que no pueda realizar las mismas actividades que antes durante la recuperación, o que sea necesario realizar curas y/o visitas periódicas al médico.
Pero también es importante explicarle que se trata de algo temporal y que todo mejorará tras la recuperación del post-operatorio.
Preparar a un niño es importante porque una operación puede resultar estresante para la mayoría de las personas, y mucho más para los niños. Para conseguir reducir la ansiedad y los miedos en los niños ante una operación es importante que los hagamos partícipes del proceso, es decir, contarles lo que ocurre, el por qué y resolver todas sus dudas y preguntas.
De este modo los niños sabrán qué esperar y no les pillará desprevenidos, permitiéndoles así afrontar mejor la situación.
Y en caso de que te preocupe algún comportamiento de tu hij@, no dudes en ponerte en contacto con Psicoterapia Serendipia o en el servicio de Psicología Infantil.